Acerca del proveedor

Nombre: Susanna Harkonen
Disciplina/Credenciales: Consejero titulado
Modalidades: Safe and Sound Protocol (SSP), EMDR, CBT, ASDCS, CCTP, procesamiento/integración sensorial, mindfulness

Antecedentes del cliente

Nombre: Bob (seudónimo)Edad y sexo: Hombre de 22 años
Programa impartido: Safe and Sound Protocol (SSP) (SSP Core and Balance, horas 1 a 5)

Bob es un estudiante universitario joven, socialmente flexible y brillante, pero no podía concentrarse y centrarse en sus estudios debido a los pensamientos intrusivos.

Por parte de madre es asiático y tiene antecedentes de traumas no procesados. Tras el divorcio de sus padres hace varios años, Bob y sus dos hermanos se quedaron con su madre, con la que mantiene una estrecha relación.

Sin embargo, la relación de Bob con su padre es distante. Su padre es caucásico y muestra algunas tendencias autistas, aunque no ha sido diagnosticado. A menudo era impredecible y se enfadaba, dirigiendo su ira contra Bob. Creaba castigo corporal y reglas que cambiaban constantemente sin el conocimiento de Bob, haciendolas dificiles de seguir. El padre de Bob utilizaba la violencia física y supuestamente obligaba a Bob a pegarse a sí mismo como castigo.

Todos los miembros de su familia bebían mucho cuando se reunían "para apoyarse mutuamente", y Bob bebía de media a una botella entera de vino al día para calmar su ansiedad.

Bob acudió varias veces a terapia en su país de origen y recibió medicación para sus trastornos. Tenía pensamientos intrusivos, ansiedad generalizada y disociación. Era incapaz de relajarse, tenía problemas problemas cognitivos y no podía concentrarse en la terapia conversacional durante las primeras sesiones debido a sus pensamientos intrusivos. Bob quería ayuda con estos pensamientos que le impedían estudiar y relacionarse con otros estudiantes, y le preocupaba su consumo de alcohol. estudiantes y le preocupaba su consumo de alcohol.

Después de haber probado muchas formas de terapia y medicación, Bob admitió que era algo escéptico sobre los resultados de la terapia, ya que sus experiencias anteriores no habían producido resultados duraderos. (Su anterior terapeuta anterior le había abandonado justo antes de empezar a trabajar con Susanna). El objetivo del tratamiento era principalmente proporcionarle apoyo regular durante su programa de intercambio universitario, que duraba un semestre, antes de que antes de que pudiera volver a su país y encontrar un terapeuta habitual.

Aplicación del SSP

Bob empezó directamente con el Núcleo SSP porque no tenía sensibilidades específicas. Debido a las restricciones de COVID-19, el programa se impartió a distancia mediante escucha independiente seguida en línea (pero no escuchando juntos) durante 30 minutos al día, con controles regulares semanales o quincenales en línea a través de Zoom y seguimientos diarios a través de WhatsApp (mensaje de texto) durante los primeros 10 días.

Bob se tomó un breve descanso del programa tras las primeras cinco horas, pero pidió seguir escuchándolo a diario porque tenía un efecto muy positivo y significativo en él. Utilizó el programa SSP Core durante un mes y medio más, y luego cambió al programa SSP Balance. Desde principios de octubre de 2022, escucha el programa a diario o varias veces por semana y sigue utilizando ambos programas.

Su entrega SSP fue apoyada por la psicoeducación sobre el trauma, la teoría polivagal y el trauma del apego, así como la co-regulación durante las sesiones en línea y tres sesiones cara a cara al principio y al final de la terapia.

Estaba ansioso por aprender más sobre los temas tratados y llegó a tener bastantes conocimientos sobre la teoría polivagal y la neurociencia que subyace al trauma, lo que ayudó a su trabajo conjunto y aumentó aún más su confianza en el SSP. Al cabo de una o dos semanas de empezar el SSP, Bob aumentó las actividades deportivas y sociales por su cuenta y limitó su consumo de alcohol a las ocasiones sociales.

 Respuesta al tratamiento SSP

La proveedora Susanna Harkonen compartió el siguiente testimonio de Bob:

El Safe and Sound Protocol me sorprendió y mejoró enormemente mi bienestar general. Llevaba meses lidiando con un episodio persistente de problemas de depresión, ansiedad, pensamientos intrusivos y disociación cuando empecé el protocolo. Después de la primera sesión, no sentía casi nada. Después de la tercera sesión, sentí una calma sutil que no había sentido en meses. Mis síntomas mejoraron gradualmente hasta que terminé el protocolo, e incluso después de eso, continuaron.

Lo que me parece interesante de la SSP es que es tan sutil: no hay un momento mágico de remisión. En lugar de eso, simplemente terminaba las sesiones y seguía con mi vida normal. Poco a poco, me di cuenta de que me sentía mucho mejor que en meses. Podía disfrutar de la paz y volver a conectar con el mundo. La motivación y el optimismo que me proporcionaron estos primeros momentos de reducción de los síntomas me permitieron cambiar por completo mis hábitos cotidianos, lo que me condujo aún más a la curación. Después de unas cuantas sesiones de SSP, por ejemplo, empecé a moverme más, a leer más y a beber menos.

En general, estoy inmensamente agradecida por la SSP y la reducción de la depresión, la ansiedad y los pensamientos intrusivos que me ha proporcionado. Puedo volver a disfrutar de la vida y experimentar la paz. Tengo motivación para cambiar mi estilo de vida e incluso soy optimista respecto al futuro.

Debate

"Me encantó ver los enormes cambios físicos, mentales y emocionales del cliente", dijo Susanna. "Esta intervención funcionó especialmente bien porque desde el principio establecimos una buena alianza terapéutica, [él] es joven y realmente quería mejorar, tenía la mente abierta y estaba entusiasmado por probar nuevos enfoques, e inmediatamente absorbió y aplicó la mayoría de las partes que aprendió a través de la psicoeducación."

Susanna señaló que al principio tuvo cuidado de no ir demasiado rápido porque el entrenamiento hacía mucho hincapié en que menos es más y dudaba un poco en hacer una segunda serie de SSP Core inmediatamente después de la primera.

"Cuando empezamos la terapia, me preocupaba mucho el estado del cliente, e incluso su seguridad, porque estaba claramente alterado y agobiado. No estaba segura de cuánto podía hacer por él, si es que podía hacer algo". ella. Sin embargo, como Bob mejoraba tanto y tan rápido, ella le seguía de cerca y se aseguraba de que el impacto fuera positivo y no abrumador.

"Creo que el SSP es una gran herramienta para Gen Zs y especialmente los estudiantes ansiosos porque se puede entregar a distancia, fácil y discretamente, y el costo de la entrega puede mantenerse razonable porque el SSP requiere menos [uno-a-uno] que la terapia conversacional".

"Fue muy hermoso ver cómo el cliente mejoraba sesión tras sesión, se volvía más comunicativo y sociable y empezaba a informar de elementos positivos sobre su vida, incluidas las citas y otras actividades sociales", añadió Susanna añadió. "Sigue manteniéndome informada y recientemente informó de que se llevaba mejor con su madre".



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